Señor, ¿tienes lugar en el mundo?
¿Tiene lugar en el mundo tu Palabra y el que quiera seguirla?
Te hemos desterrado de nuestras vidas y de nuestros endurecidos corazones; todo los ocupa menos Tú; el egoísmo nos embriaga y padecemos la más absoluta ceguera.
¿Qué esperanza queda para el que cree en ti y quiere seguirte?
La persecución de tus seguidores que empezó tras tu muerte y resurrección, no ha terminado y quizá sea ahora más peligrosa y dañina que en un inicio, pues en aquella época los cristianos se arriesgaban a perder su vida y hoy se arriesgan a perder su alma, presas de la desesperación y el desaliento por enfrentarse a un mundo que los señala con el dedo como si fueran locos, criminales o brutos ignorantes.
¿En qué momento el pecado se convirtió en virtud y la virtud en ignorancia? ¿Quién escondió la Verdad de los ojos del hombre? ¿Hacia dónde nos dirigimos? ¿Qué camino debemos tomar? ¿Dónde encontraremos un refugio?
Señor, ¿qué esperas de los que aún intentan seguirte? ¿Cómo deben actuar aquellos que aún creen en ti? ¿Deben callar y esperar o actuar y gastar hasta su último suspiro en darte a conocer a quienes, por alguna razón, no sólo no te conocen sino que no quieren conocerte? ¿Deben sólo orar? Y por otro lado, ¿cómo se conjuga la oración con el testimonio de vida? ¿Es suficiente limitarse a vivir tanto como se pueda conforme a tu Palabra y pasar por alto cómo aquéllos a quienes más se ama se entregan al mal?
Señor, ¿qué significa “velar y orar”? ¿Cómo denunciar el error sin ser llamado hipócrita o soberbio? ¿Cómo se puede ser manso y al mismo tiempo intentar mostrar la Verdad que no admite concesiones? ¿Se puede ser sencillo como la paloma y astuto como la serpiente?
¿Cuál es la respuesta a todas estas preguntas? ¿Es posible siquiera encontrarla?
Sé Tú nuestro guía, Señor. Danos las virtudes necesarias para afrontar al mundo y superar esta dura prueba, para aceptar lo que no podemos cambiar y para cambiar lo que sí podamos, para aprovechar al máximo estas dificultades y dar testimonio verdadero de tu amor, para soportar las carcajadas infernales de quienes se mofan de lo más sagrado y el escándalo que ocasiona el asegurar que hay una Verdad y que esa Verdad eres Tú.
Virgen María, Madre de misericordia, ruega por nosotros.
Se puede ser sencillo como la paloma y astuto como la serpiente
ResponderBorrar¿Tu crees que si fuera sencillo valdría la pena?
¿Tu crees que si todo fuera justicia habría cabida a un héroe?
¿Cómo pretendes aprender sin caerte?
¿Cómo puedes estar tan segura de que el mundo no necesita de personas como tu que muestren una manera alternativa de vida?
¿Nunca te tocó un maestro que dominaba perfectamente su materia pero era pésimo enseñando?
O el que sabía muy poco pero sabía como llegar a cada uno de sus alumnos.
Hay una constante para alejarnos de Dios y son las distracciones. Los medios masivos nos distraen de la realidad, porque la realidad es dura.
Estamos ante la política del miedo. ¿Quien querría mirarse al espejo desnudo? Para eso es la ropa de marca, los lentes oscuros, las fragancias... todo lo que sea necesario para escondernos y convertirnos en un estándar.
¿Que vino a hacer la revolución industrial? Bajo la política de cero error le quitó la firma al artesano.
Lo mismo pasa en las mentes y en los corazones. Si alguien te pregunta el por qué eres como eres, espera que le des una referencia de algún personaje actual con cual etiquetarte. Pero ¿sabes quienes hacen la diferencia? Los que se convirten en personajes por sí mismos.
Claro que recibirás ataques de las personas que son incapaces de verse en un espejo si saben de antemano que no les gustará lo que verán. Somos bebés en busca del autoconocimiento. Somos un cristal que ante la luz se ve opaco y viejo. Pero un alma limpia deja pasar esa luz llena de paz sin sedimentos que la detengan. Porque dejas de ser tú para ser una ventana transparente a los ojos de Dios. Los sedimentos dentro de nuestras almas arden en llamas al paso de la potente luz de Dios. Es por eso que necesitamos pureza para evitar ese dolor de transición a lo que es inevitable, el amor de nuestro Padre.
Señalar evdencia a las personas, la vergüenza se traduce en agresión. Pero la mejor manera de enseñar es con el ejemplo, ese es el mejor maestro. Es como una roca que cae en aguas que asemejan tranquilas pero que gritan desesperadamente por un alivio desde lo profundo, esa roca deja ondas de cambio conforme cae, conforme se convierte en maestro, esa roca se pule, y no por ser roca deja de cambiar, dejando regado en su camino sus imperfecciones.
Tu sólo puedes mostrar tu camino, recorriéndolo y si hay gracia y alegría en tu corazón. Si hay éxito en tu mirada y con ello podemos ver en tu alma el corazón de un niño, pasarán dos cosas: Dejará de importarte lo que te digan y te convertirás en un personaje, en un líder, en un camino y en la ventana al paraíso. Y entonces tu dejarás de buscar, entonces tu serás requerida y no te darás abasto. ¡Ánimo!
- Leo
(leo_sb@hotmail.com)
Gracias por tus enriquecedores comentarios, Leo. Espero que sigas leyendo y comentando. Tienes razón, si fuera fácil, no valdría la pena. Y no espero convertirme en un personaje, pues yo misma necesito mucha ayuda, sólo me basta con que las personas encuentren el verdadero camino, no importa que no sea yo quien se los muestre. Gracias de nuevo :D
ResponderBorrarTienes razón, ahora es más dificil que nunca estar cerca de Dios, pero entre más dura sea la lucha, mayor será la recompensa.
ResponderBorrarMuchas veces me he hecho muchas preguntas acerca de la Verdad, pero las respuestas siempre me llevan a creer en Dios, por eso jamás he dudado de su existencia. Pienso que para dar testimonio de su existencia, primero debemos encontrarla nosotros mismos y por ende actuar junto con su existencia. Al final, de manera inconsciente y desde lo más profundo del corazón, tus acciones se vuelven las acciones de Dios...
ResponderBorrarMe encanta que expongas tus razones para creer en Él...lo mejor es que Él siempre nos da la respuesta...
Sara, tu amiga que siempre piensa en ti...